viernes, 16 de mayo de 2008

Desde la inexistencia

Las miradas vacías se cruzan una vez más, “las cosas no siempre salen bien”, ¿que pasa cuando nunca, nunca salen bien? ando la esperanza por verte se convierte en leyenda, cuando tu cara queda borrosa con el tiempo, mientras mi corazón espera y espera que aparezcas aun sabiendo que jamás volverás a tocarme o a besarme; porque ya ni tan siquiera te acuerdas de mi, ni me piensas y mucho menos me sueñas.
Mientras en el ayer tú te perdías cada anochecer en las manos seductoras del alcohol y el éxtasis blanco de la locura yo me perdía en el deseo de pertenecerte de dejar que me dominarás sobre tus sábanas, y yo para ti empecé a volverme transparente y desaparecí de tú vista, de tu mundo del cual pensaste que no volvería a salir.
Y tú para mi te convertiste en obsesión luego entre la desesperanza y el anhelo herido te volviste una mentira, un sueño inalcanzable que escapa de mis manos una y mil veces hasta que espero que alguien me mienta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es un duro trago sentirse ignorado...
cuanto más doloroso si se trata de una persona amada...
Escribes bien...
Saludos.

"Ego sum ille qui times"